si no sabes por qué consolador decidirte te ayudamos a escoger el que más se adapta a tus necesidades para que puedas llevarte a casa el consolador ideal y empezar a disfrutarlo desde el primer momento.
¿Qué quieres conseguir de tu consolador?
Es indispensable saber para que estas pensando utilizar tu consolador. Tienes los más tradicionales con forma de pene, los puedes usar para la penetración anal o vaginal, otros estimulan el punto G, los hay que se utilizan para la estimulación anal exclusivamente o el clítoris. Tienes diferentes opciones, escoge la que más se adapte al uso que le darás.
¿El tamaño no importa?
Si, sí que importa, si no fuera un factor importante no habría diferentes tamaños a elegir. Los estimuladores anales y los que buscan el punto G suelen ser más pequeños, luego tienes los más comunes de 20 centímetros y los penes de tamaño XXL.
El grosor más común ronda los 3 ó 4 centímetros, claro que también los puedes encontrar más gruesos. Lo importante es que sea cual sea tu gusto tendrás un consolador que se adapte a tu medida y podrás gozar sin límites.
Están fabricados en materiales suaves que favorecen la penetración, puedes utilizarlos con lubricante para que se deslice mejor en tu vagina o ano y la experiencia será más placentera.
Los consoladores más comunes son los fabricados en silicona y gelatina (Jelly), siendo los top ventas los consoladores realísticos que más que un juguete erótico parecen un pene real.
Los realísticos, son los consoladores más vendidos, imitan penes de actores famosos y no les faltan detalles. Tienen venas, pliegues, piel retráctil y también testículos. Ideales para dejar volar la imaginación y sentir como un pene real te penetra, podrás sentir sus venas y pliegues cada vez que entre y salga de tu vagina y no podrás parar de gozar.
Además, muchos de ellos cuentan con un sopapo en su base que puedes adherir a cualquier superficie lisa, olvídate de sujetarlo y ocupar tus manos en él.
Prueba a ponerlo sobre el suelo y cabalgar sobre el consolador, podrás ocupar tus manos en suaves caricias en tu pecho o en el clítoris, será un verdadero placer.
Si eres una mujer exigente, que disfruta y goza de su sexualidad libremente y sin vergüenza, elige un consolador de doble penetración. Puedes penetrarte al mismo tiempo por delante y por detrás, doble penetración, doble placer.
Elige el consolador que más se adapte a ti y no reprimas tu sexualidad. Sorprende a tu pareja e invítale a jugar contigo, no se arrepentiran ninguno de los dos.
Y tú, ¿Qué consolador prefieres?
¿Qué quieres conseguir de tu consolador?
Es indispensable saber para que estas pensando utilizar tu consolador. Tienes los más tradicionales con forma de pene, los puedes usar para la penetración anal o vaginal, otros estimulan el punto G, los hay que se utilizan para la estimulación anal exclusivamente o el clítoris. Tienes diferentes opciones, escoge la que más se adapte al uso que le darás.
¿El tamaño no importa?
Si, sí que importa, si no fuera un factor importante no habría diferentes tamaños a elegir. Los estimuladores anales y los que buscan el punto G suelen ser más pequeños, luego tienes los más comunes de 20 centímetros y los penes de tamaño XXL.
El grosor más común ronda los 3 ó 4 centímetros, claro que también los puedes encontrar más gruesos. Lo importante es que sea cual sea tu gusto tendrás un consolador que se adapte a tu medida y podrás gozar sin límites.
Están fabricados en materiales suaves que favorecen la penetración, puedes utilizarlos con lubricante para que se deslice mejor en tu vagina o ano y la experiencia será más placentera.
Los consoladores más comunes son los fabricados en silicona y gelatina (Jelly), siendo los top ventas los consoladores realísticos que más que un juguete erótico parecen un pene real.
Los realísticos, son los consoladores más vendidos, imitan penes de actores famosos y no les faltan detalles. Tienen venas, pliegues, piel retráctil y también testículos. Ideales para dejar volar la imaginación y sentir como un pene real te penetra, podrás sentir sus venas y pliegues cada vez que entre y salga de tu vagina y no podrás parar de gozar.
Además, muchos de ellos cuentan con un sopapo en su base que puedes adherir a cualquier superficie lisa, olvídate de sujetarlo y ocupar tus manos en él.
Prueba a ponerlo sobre el suelo y cabalgar sobre el consolador, podrás ocupar tus manos en suaves caricias en tu pecho o en el clítoris, será un verdadero placer.
Si eres una mujer exigente, que disfruta y goza de su sexualidad libremente y sin vergüenza, elige un consolador de doble penetración. Puedes penetrarte al mismo tiempo por delante y por detrás, doble penetración, doble placer.
Elige el consolador que más se adapte a ti y no reprimas tu sexualidad. Sorprende a tu pareja e invítale a jugar contigo, no se arrepentiran ninguno de los dos.
Y tú, ¿Qué consolador prefieres?